El reishi se cultiva en 3 pasos. En 3 pasos aprenderás cómo cultivamos reishi en MundoReishi.
SI quieres aprender con detalle como es el proceso, disponemos de un aula de formación y laboratorios desde donde impartimos anualmente cursos prácticos de sobre cultivo de hongos medicinales y comestibles. Consúltanos.
Paso 1: Aislar el hongo y producir “semilla” de reishi
Cepa padre
Lo primero que hay que hacer es recoger una seta reishi en el campo y que un especialista nos la verifique. Disponemos de un servicio gratuito de identificación en: aporsetas.com
Esto es muy importante porque frecuentemente la seta de partida no es reishi y el futuro cultivo no será seta reishi, si no clones de la seta de partida. Por ello, aunque en la actualidad se cultive reishi en más de 15 países, muchos productores están cultivando especies parecidas a Ganoderma lucidum pero que no son esta seta, como mostramos en nuestro blog: el cultivo de reishi en el mundo.
Una vez verificada la seta “padre” deberemos limpiarla por fuera y, en condiciones estériles, coger un fragmento interno de la misma y ponerlo sobre una placa con medio de cultivo específico para hongos. Medios de gelatina de agar enriquecidos con diferentes componentes son ideales.
Imagen de esta padre limpia para la extracción de un fragmento de la seta. El fragmento se deposita en esterilidad, dentro de la placa con medio de cultivo (Dra. MV Ozcariz).
Replicación en placas
Sellamos la placa y la mantenemos a temperatura ambiente (20-25ºC) y a oscuras, ya que el hongo que produce el reishi crece mejor en condiciones de oscuridad. En unos días empezaremos a ver crecer micelio de Ganoderma lucidum (¿qué es el micelio?) que partirá desde los fragmentos de seta depositados sobre en la gelatina hacia los bordes de la placa.
Micelios de obtenidos desde diferentes fragmentos en placas de Ganoderma lucidum (Dra. MV Ozcariz).
El aislamiento también se puede hacer sobre tubos de ensayo con agar enriquecido, que sellaremos por arriba para que no se contamine, como se ve en la siguiente foto. Esta técnica nos permite acumular muchas cepas de hongos en poco espacio.
Diferentes hongos aislados de campo dentro de tubos de ensayo (Dra. MV Ozcariz).
Estos pasos se pueden excluir y comprar directamente micelio de seta reishi aislada por distinto proveedores. Cada cepa tendrá sus características: principios activos, productividad, eficiencia biológica, etc… debidas a su variabilidad genética.
Producción de micelio
Cuando la placa de micelio que hemos obtenido está colonizada por el hongo, debemos extraer fragmentos del mismo y depositarlos en nuevas placas con medio de cultivo. Así obtendremos más “placas padre”. Este micelio se considera de 2º generación.
Micelio de Ganoderma lucidum de segunda generación, invadiendo toda la placa (Dra. MV Ozcariz).
Si la cepa obtenida realmente tiene interés porque es una cepa productiva y de gran contenido en principio bioactivos, sería interesante conservar una de estas placas de segunda generación ya que, una vez que tengamos la plantación en marcha, con el paso del tiempo el hongo va a sufrir modificaciones y podrá degenerar y empezar a producir setas deformes o mermar la producción de seta reishi.
Si de verdad el hongo aislado es interesante, podemos conservar el micelio vivo en nitrógeno líquido durante decenas de años, para poder reutilizarlo cuando sea necesario. Por supuesto para un cultivar reishi en pequeña escala podemos obviar esto.
Se pueden comprar placas de micelio de Ganoderma lucidum y otros hongos silvestres de origen español en la tienda de cultivo da aporsetas.com
Micelio en semilla
A continuación, deberemos trasladar el hongo obtenido a un sustrato que se maneje cómodamente y que servirá como “semilla” para la planta de producción. Normalmente se utiliza como sustrato granos de cereal, que se manejan bien
Para realizar esto sacaremos fragmentos de micelio de las placas y los depositaremos en frascos que en su interior tengamos semillas de cereal hidratado y esterilizado. Se pueden utilizar cebada, trigo, centeno… y mejor seleccionarlos los que sean de origen ecológico, para que no posean fungicidas en su composición ya que dificultarían el crecimiento del hongo.
Estos frascos de cereal inoculado con micelio los almacenaremos también en oscuridad y a temperatura de 20-25ºC para que el hongo invada todo el cereal.
María Virginia Ozcariz, ingeniera industrial y directora de cultivo en MundoReishi, con una muestra de grano de cereal inoculado con Ganoderma lucidum: “semillas de reishi”
Después de unos cuantos días, tiempo que dependerá de la cantidad de sustrato y micelio añadido, el cereal estará cubierto de hongo Ganoderma lucidum, como vemos en la imagen. Ya tendremos todo listo para la siguiente fase de cultivo.
“Semilla de reishi” obtenida siguiendo los pasos anteriores. no es mas que grano de cereal inoculado con micelio de Ganoderma lucidum
Existen tiendas en internet que venden directamente grano inoculado, listo para usar, con lo cual evitaríamos todos estos pasos anteriores.
En “aporsetas.com” encontrarás bolsitas de micelio en grano de reishi, listo para hacer ensayos de cultivo.
Paso 2: Preparar el alimento del hongo y dárselo a comer
En este segundo punto para cultivar reishi enseñaremos a preparar el alimento del hongo (sustrato) y se lo daremos a comer para que posteriormente produzca la seta reishi.
Elegir el alimentos (sustrato)
Para preparar el sustrato del hongo podemos fijarnos en lo que el hongo Ganoderma lucidum come de forma natural.
A modo de referencia, en España el hongo aparece principalmente sobre madera de fagáceas (robles, encinas, hayas). Conozca más sobre el reishi en este enlace.
Cualquier madera triturada de planifolios valdrá como alimento. Se suele mezclar con un 10% de cereal y 10% de salvados. Nunca deberemos utilizar maderas de coníferas como pinos, abetos o piceas, pues en general no le gustan a G. lucidum, aunque si a otras especies de Ganoderma, como G. carnosum.
Para elaborar el sustrato existen centenares de variantes, casi cada explotación utiliza su composición de composición. Desde MundoReishi llevamos años evaluando diferentes sustratos.
En nuestra última publicación científica se comparó la eficiencia de cultivo de 16 composiciones de sustratos con 3 formulaciones elaboradas por investigadores de nuestro equipo. Por si deseas ver las comparativas de los mismos, busca esta publicación en google:
La importancia de la selección de un sustrato adecuado definirá parte de la composición de la seta. Por ello este paso es crucial para la obtención de un buen reishi.
Una vez que elegimos qué dar de comer al hongo, debemos matar todos los microorganismos que tenga su alimento, es decir, deberemos esterilizarlo. Esto hay que hacerlo porque en el sustrato hay especies de hongos y bacterias que de forma natural están ahí y pueden competir con el hongo Ganoderma lucidum, e incluso desplazarlo. No esterilizar o pasteurizar el sustrato pueden reducir la producción de seta reishi, contaminar la producción obtenida, o incluso impedir que el hongo genere setas.
Limpiar (esterilizar) el sustrato
Para esterilizar el sustrato introduciremos éste en bolsas para esterilización como éstas, tapers de plástico (que aguanten altas temperaturas) o botes grandes de cristal de conservas, por ejemplo. La forma de esterilizar los sustratos es muy similar a la forma en que se hacen conservas caseras: se introduce el sustrato en un recipiente que pueda contener agua a alta temperatura y presión, como una olla a presión y se deja tiempo para que se mueran los microorganismos. Lo ideal sería utilizar una autoclave, que funciona básicamente como una olla exprés, pero está mejor diseñada para esta función. Dependiendo del grosos de las bolsas o frascos del sustrato elaborado se deberá usar más o menos tiempo de esterilización. Una bolsa de 15cm cm de grosor puede estar lista en 15-20 min a 121ºC.
Autoclave de 100l de nuestro laboratorio
Una vez que el sustrato está esterilizado deberemos sacarlo de la olla y añadir al mismo la semilla generada en el paso anteriores. Después pondremos la bolsa ya inoculada (con el hongo en su interior) en una sala sin luz y a temperatura ambiente. El hongo irá invadiendo el sustrato poco a poco, alimentándose y creciendo hasta invadir toda la bolsa/recipiente. En ese momento pasaremos al paso número 3.
Bolsas con sustrato siendo invadidas por micelio de Ganoderma lucidum (cultivos Dra. MV Ozcariz).
También se puede hacer así
Existen otras formas de cultivar reishi que no son realizarlo sobre bolsa o recipiente con sustrato estéril, como explicamos aquí..
También encontramos el cultivo tradicional sobre troncos enterrado, que tiene diferencias importantes, como cotamos aquí: ¿Es mejor un reishi de cultivo tradicional o uno de cultivo moderno?
Sin embargo, para garantizar una composición constante del reishi obtenido, con una calidad estandarizada, estos métodos no serían adecuados.
Al igual que en los pasos anteriores en internet existen empresas que suministran bolsas inoculadas con el hongo para que produzcas tu seta reishi en casa sin necesidad de realizar estos dos pasos anteriores.
Sala de clonización: en esta sala, que tiene que estar a oscuras, el hongo crece colonizando el sustrato elaborado.
Paso 3: Fructificar el hongo y cosechar el reishi
Fructificación del hongo
Una vez el hongo ha invadido las bolsas de sustrato, deberemos abrir las mismas y llevarlas a una zona con luz y aire fresco. Así el hongo detectará el cambio de luz y CO2 ambiental y comenzará a fructificar.
Veremos entonces que empezarán a desarrollarse primordios de reishi, unas aglomeraciones de hifas blancas en forma de bola, que luego se transformarán poco a poco se transformará en una seta reishi lista para cosechar. Del primordio primero se desarrollará el pie de la seta y al final del pie aparecerá el sombrero.
Diferentes formas de fructificar
Para que la seta crezca con muy poco pie y mucho sombrero deberemos ventilar la sala frecuentemente y que la sala tenga buena luz. En cambio, si queremos que la seta tenga mucho pie y poco sombrero, llevemos las bolsas de setas a una atmósfera cargada de CO2, como puede ser una oficina con varias personas y mejor con poca luz: alejadas de las ventanas.
Si quisiéramos que sólo fructifiquen pies de reishi fructifiquen, como se cultivan lo que llaman sumo reishi, reishi banzai o rokkaku reishi, y otras “falsas variedades” (aquí lo explicamos) deberemos dejarlas con muy poca luz y sobre todo con mucho CO2 (no ventilar nunca o disponer de una bombona de CO2 que eleve el nivel de CO2 de la sala de fructificación).
Crecimiento de reishi en forma de cuerno: Se cultiva en salas con altos niveles de CO2.
Para obtener setas bonitas deberemos dejar la bolsa siempre en la misma posición y con ventilación más o menos alta: conseguiremos así un buen pie y una seta bien formada. Lo de dejarla en el mismo lugar es para que no haya cambios de inclinación de la bolsa: Ganoderma lucidum genera el sombrero de sus setas con la parte de debajo (los poros) más o menos paralelos al suelo. En cambio, si frecuentemente movemos las bolsas, las posibles alteraciones de inclinación producirán sombreros algo deformes y quizá no tan bonitos, aunque todo es cuestión de gustos.
Recolectar las setas
La recolección del reishi deberá hacerse cuando el borde del sombrero de la seta ya no sea de color blanco. Eso indicará que ha cesado su crecimiento. Por más tiempo que dejemos la seta sobre el sustrato no vamos a obtener más cantidad de reishi.
Si quisiéramos recoger las esporas de reishi, que son un producto totalmente diferente al reishi (es como la semilla del hongo – aquí lo explicamos-), este sería el momento de más producción de la seta.
Cuando la seta ha dejado de crecer el hongo invierte sus recursos en producir esporas en gran cantidad (millones y millones de esporas ellas al día). Para cosechar las mismas hay muchos métodos.
El más sencillo es colocar el sombrero de la seta dentro de una bolsita de plástico que recoja las esporas que se vayan desprendiendo. Como esto da muchísimo trabajo a gran escala lo que se hace es colocar unos plásticos grandes por la sala de cultivo que recogerán buena parte de las esporas.
Imagen de seta reishi con esporas: El borde de la seta está lleno de esporas que cuelgan. Todo el polvo marrón que se observa en la foto también son esporas, que se podrían recolectar para la venta. Este producto es muy diferente a la seta reishi (cultivos Dra. MV Ozcariz).
Sobre el consumo de las esporas de reishi, hay que indicar son muy resistentes a los jugos digestivos y que nuestro organismo apenas tiene capacidad de romperlas y digerirlas.
Han de romperse por diferentes métodos, por CO2 hipercrítico por ejemplo, para que sea mucho más asimilables.
Aun así es un producto que no debe consumirse como si fuera reishi, porque como vemos, es totalmente diferente a la seta reishi y, por ello, no es para nada lo mismo.
Indicaciones que definirán la calidad de las setas producidas
Si bien es sencillo cultivar reishi, conseguir que las setas producidas sean de alta calidad es mucho más difícil. Entre otros factores a considerar, los más importantes son esto tres:
Las características genéticas del organismo “padre”
La seta padre que aislemos del campo tiene unas características genéticas únicas que se traducen en una composición y propiedades únicas, diferentes a la de otra seta reishi recolectada en otro lugar. Siendo todo el mismo organismo, Ganoderma lucidum, unas cepas tienen más moléculas bioactivas que otras, tal como se ha demostrado en algunas investigaciones. Esto lo explicamos con detalle en este artículo de nuestro blog.
La composición del sustrato
Cambiar la composición del sustrato modifica la alimentación del hongo y por ello la composición de la seta. Así trabajar con unos sustratos u otros cambia la composición de sus moléculas bioactivas. Sustratos muy productivos puede no producir setas de alta calidad, y a la inversa. Esto es lógico: si los sustratos carecen de algún nutriente necesario para el hongo, las setas que produzca el hongo carecerán de este nutriente. En consecuencia, la calidad será distinta a la de un sustrato que sí que tenga este nutriente.
Condiciones del cultivo de reishi
El nivel de CO2, la temperatura, la luz… la importancia de esto en la calidad final de una cosecha de reishi es muy importante. Podemos haber seleccionado una cepa muy activa, creciendo sobre un sustrato idóneo, pero si las condiciones de cultivo no son las ideales eso repercutirá en el producto final.
Para que nos hagamos una idea de lo importante que es esto, hay empresas que hablan de variedades de seta reishi: rokkaku reishi, reishi banzai, reishi en forma de cuernos, etc. Cuando realmente lo único que están haciendo es alterar las condiciones de cultivo para modificar el crecimiento de la seta. (lo explicamos con detalle en este artículo del blog).
Si bien estos factores influyen en la calidad de la seta obtenida al cultivar reishi, existen otros factores que, después del cultivo, influyen en la calidad del producto final que llega al consumidor.
Por ejemplo, si un reishi se seca bajo el sol, como se hace en muchos países (debido a que es muy económico) la radiación ultravioleta degradará y oxidará muchos principios activos.
A su vez, si el reishi se “tuesta” durante en el proceso de molienda (olerá a tostado) se habrán dañado decenas de principios activos, y otras muchas cosas que explicamos en otras zonas de nuestra web.
Desde MundoReishi, de la mano de la Dra. Virginia Ozcariz, llevamos cultivadas 7 cepas de reishi de procedencia Española.
Nuestras experiencias de cultivo de reishi las publicamos en revistas científicas de impacto y en diversos congresos, como podrás buscar.
Ah! Tamibén es importante aclarar que todavía no hemos conseguido cultivar un producto mejor que el que actualmente vendemos. Aquí te contamos sobre el origen de nuestro reishi.
Si quieres el mejor reishi puro, aquí tienes nuestra tienda online.
Y si quiere probar a cultivarlo, a pequeña escala, aquí tienes micelio en grano de reishi, para cultivos y también podrás solicitar precios al mayor.