Tener el colesterol alto (LDL) ¿es peligroso?
“Tengo el colesterol malo alto, si no me tomo la pastilla puedo tener problemas en un futuro.” Esta es una frase típica que escuchamos a la gente.
Pues resulta que en Noruega se hizo un seguimiento con más de 57.000 pacientes durante 10 años y se concluyó que tener el colesterol alto no sólo es inofensivo si no que en el caso de las mujeres se puede considerar beneficioso. Por el contrario tener el colesterol bajo aumenta la mortalidad (enlace a estudio científico).
Otra investigación en Pensilvania, EEUU con 96.043 participantes, demostró que tener el colesterol bajo aumenta el riesgo de ictus hemorrágico, problema gravísimo que se origina cuando se rompe un vaso sanguíneo en el cerebro (enlace a la noticia).
Todas las investigaciones apuntan a que debemos preocuparnos cuando el colesterol está por debajo de 100, y no por encima de 200. ¡Tener el colesterol bajo es lo peligroso!
El colesterol alto ¿puede provocar problemas al corazón?
Otra frase muy típica de escuchar en la calle: ”Tengo que bajar el colesterol porque me puede provocar problemas de corazón”.
¡Nada menos cierto! El 75% ingresados con ataque al corazón en EEUU ¡Tenía el colesterol bajo! (cita). Es decir 3 de cada 4 personas que tienen ataque al corazón tienen el colesterol bajo, no alto. Y la cantidad de personas estudiadas fue de 136.905 pacientes
Y es que desde ya hace muchos años existen publicaciones que indican que el colesterol alto reduce el riesgo de fallo cardiaco, pero parece que a nadie le interesa difundirlo.
Por ejemplo, esta investigación de la universidad de UCLA indica que ante un fallo cardiaco, el colesterol alto incrementa el índice de supervivencia (sobrevive más gente) y mejora el pronóstico comparado con las personas que tienen el colesterol bajo (cita).
Por el contrario tener el colesterol bajo aumenta el riesgo de ictus hemorrágico, es decir el riesgo de que se rompa un vaso sanguíneo en el cerebro, aumenta el riesgo mientras más bajo tengamos el colesterol (cita).
Entonces ¿el colesterol es malo?
Si no ha quedado ya claro voy a contar lo siguiente: LDL, HDL… son formas de transporte de colesterol dentro de la sangre. Va unido a proteínas.
El colesterol, esté como esté, es una molécula fundamental para la vida. No es malo. Es indispensable para muchas cosas como: fabricación de hormonas en el organismo, los estrógenos o la testosterona. También forma parte de las paredes de nuestras células o por ejemplo nos ayuda a digerir mejor las grasas de los alimentos, siendo un componente de la bilis.
Por esto, como mucho, el colesterol se le debería poner el apelativo de bueno y no de malo.
¿Por qué siguen informando por todos los medios que el colesterol LDL es malo?
Sin duda: los miles de millones de euros que mueve la venta de estatinas, las moléculas reductoras de colesterol, y los interesas creados, son una buena razón.
Curiosamente los estudios científicos que indican que el colesterol LDL alto (<200) dan problemas, están llenos de fallas metodológicas o errores estadísticos, hechos a propósito, tal como se indica en esta reciente revisión científica sobre el tema (cita). Por desgracia los organismos oficiales siguen apoyándose en estos estudios científicos sesgados.
Es muy importante decir que los médicos no tienen ninguna culpa. Ellos dan y deben dar por bueno los patrones que se les da desde los organismos oficiales, que para eso están.
Los organismos oficiales son los que deben de actualizarse a las nuevas evidencias científicas y corregir los parámetros actuales sobre los niveles que son buenos y malos del colesterol LDL.
Atención: las placas de colesterol si pueden ser mortales
Pero hay algo del colesterol que sí es peligroso.
- El colesterol existe y es cierto que se pega a nuestras arterias y venas.
- El colesterol puede formar placas en nuestro sistema circulatorio.
- Las placas de colesterol te pueden matar. Por ejemplo, si se desprende un trozo de placa de colesterol de una arteria, este puede girar y taponar el vaso por el que se mueve.
- Si el vaso bloqueado controla el flujo de sangre al cerebro provocará un ictus.
- Si bloquea una arteria que oxigena el corazón originará un ataque al corazón.
El verdadero problema no es la cantidad de colesterol LDL en sangre, si no las placas de colesterol.
¿Y por qué se forman estás placas?
El origen de las placas: La dieta rica en el colesterol “oxidado”
Cuando una persona tiene alto el colesterol le dicen: no comas embutidos, quesos, pizzas, hamburguesas, bollería industrial, etc.
El queso, los embutidos, las grasas animales fritas, la bollería industrial… Todos estos alimentos tienen algo en común: contienen colesterol “oxidado” o lo que también se llama oxisteroles.
Durante el proceso de curado de un rico chorizo este se deja colgado unos meses en cámaras de curado. Con el paso de los días el colesterol natural (y sano) de la carne reacciona con el oxígeno ambiental y se oxida, transformándose en colesterol oxidado (y otros oxisteroles) mediante complicados procesos.
Lo mismo sucede con un exquisito queso viejo: el colesterol que tiene, proveniente de la leche, que está expuesto al aire y reacciones oxidantes durante meses que lo transforma negativamente.
Al igual que es distinto el hierro que el hierro oxidado (uno es metálico y otro es un polvo marrón rojizo), el colesterol es muy diferente del colesterol oxidado.
Cuando ingerimos estos sabrosos alimentos con oxisteroles estos pasan al estómago, de ahí al intestino, y de ahí llegan a la sangre.
Ya en el torrente sanguíneo y el colesterol malo (colesterol oxidado) comenzará a “colocarse” en el lugar del colesterol bueno (el no oxidado) y dará problemas, originando inflamación primeramente, una inflamación del tejido vascular (cita).
Las células que en lugar de colesterol tienen colesterol oxidado en sus paredes pierden su elasticidad natural poniéndose mucho más rígidas y frágiles: son defectuosas. ¡Peligro! ¡Pueden romperse los vasos sanguíneos!
Por suerte nuestro sistema inmune, que es muy inteligente, detecta el problema y antes de que suceda nada, avisa al hígado para que produzca y envíe colesterol LDL al lugar. Este colesterol se pegará a la zona dañada y ayudará a que se reparen las células defectuosas.
El daño en el tejido arterial originado por oxisteroles y otras sustancias dañinas como el TMAO, incrementan el LDL sanguíneo. Por eso cuando comemos mal (pizzas, quesos, embutidos, hamburguesas, etc.) nos sube el colesterol LDL. Pero el colesterol LDL es bueno, es el que repara. Y aparece porque estamos dañándonos con una mala alimentación.
El colesterol LDL va a las zonas dañadas, donde se pegará para participar en la reparación del tejido dañado: este puede ser el inicio de una placa de colesterol.
Si seguimos comiendo sustancias dañinas, el colesterol LDL ira pegándose más y más, y al final se originará una placa gorda de colesterol que, si se desprende, podrá provocarnos un ictus o un ataque al corazón o un trombo.
Otro dato: Si la placa de colesterol se produce en las arterias coronarias, puede llegar a obstruir el flujo de sangre al músculo cardíaco, lo que provocará una ‘isquemia miocárdica’ o ‘cardiopatía isquémica’. Algo grave (cita).
Algunos alimentos y su contenido en oxisteroles
Muchos alimentos son ricos en colesterol de forma natural.
- Carnes en promedio: 25-80 mg/100g
- Huevo: 200-220 mg/ unidad
- Leche fluida: 12-15 mg/100g
- Mantequilla: 180-200 mg/100g
Sin embargo, a pesar de presentar cantidades relativamente importantes de este esteroide (el colesterol es un esteroide), prácticamente están libres de oxisteroles, o sólo presentan trazas de éstos. Aquí tienes un pdf sobre ello.
Cuando estos alimentos se someten a tratamientos como calentamiento, fritura, desecación, tratamientos UHT, irradiación, etc, parte del colesterol se transforma en oxisteroles, conteniendo entre 80 a 1200 ppm según alimento y tratamiento (cita).
Aquí pongo un listado de alimentos y su contenido en oxisteroles, ordenados de menos cantidad a mayor cantidad:
- Mantequillas: 5-20
- Queso: 10-70 ppm
- Leche UHT: 20-50 ppm
- Carnes cocidas: 20-100 ppm
- Aceites animales: 20-150
- Leche en polvo: 50-150 ppm
- Patatas fritas: 140-250
- Huevo entero en polvo: 150-300
- Carnes asadas: 150-300 ppm
- Aceites animales después de una fritura: 300-800
- Yema de huevo en polvo: 400-1200
Mientras más alto el contenido de oxisteroles mayor es el daño a nuestro sistema vascular y más probable será que se forme placa de colesterol.
Fijémonos que el huevo, de no tener colesterol oxidado de forma natural, cuando se deseca, y llega a contener cantidades enormes de oxisteroles dañinos. Esto se debe a que el secado industrial de huevos se realiza pulverizándolo con un espray en corrientes de aire, que tienen oxígeno, a temperaturas calientes, que incrementan la oxidación.
Atención: El huevo deshidratado es muy utilizado en bollería industrial. ¿Será por eso que la bollería industrial sube el colesterol?
Otro dato muy interesante a nivel de salud es que los aceites animales tienen una cantidad no despreciable de colesterol oxidado (hasta 150ppm) pero si los utilizamos para frituras estos aceites: pueden tener hasta ¡800 ppm de oxisteroles! El aceite de fritura pasa a los alimentos, no lo olvides.
¡Usemos para freír aceites vegetales y, en especial, aceite de oliva virgen que es de los más estudiados como beneficioso para el organismo!
En general cualquier alimento rico en colesterol si se somete a altas temperaturas, se va a oxidar su colesterol. Mientras más temperatura, más rápida la reacción de oxidación, más colesterol oxidado tendremos en el alimento final.
De la misma forma cuando dejamos un producto rico en colesterol natural al contacto con el aire mucho tiempo, va a transformarse su colesterol en colesterol oxidado, como ya hemos comentado.
¿Por qué muchas comidas ultraprocesadas puede subirnos el colesterol?
Una rica pizza de carne: antes de meterla al horno tendrá queso (colesterol natural de la leche y algo de colesterol oxidado del proceso de curado), carne (colesterol natural), beicon (grasas animales, con alto colesterol natural) entre otros condimentos.
Cuando la metemos al horno a 180ºC durante 15 minutos buena parte de ese colesterol natural se transformará en una pequeña bomba de colesterol oxidado debido a las altas temperaturas. El resultado ya lo podemos averiguar.
Cómo impedir que se formen placas de colesterol
Ya hemos visto como una mala alimentación puede dañar nuestro sistema circulatorio, debido a oxisteroles y otras moléculas. Pero ¿Qué debemos hacer para bloquear el proceso?
Lo ideal sería reducir la ingesta de bollería industrial, embutidos, pizzas… pero a veces es muy difícil por lo ricos y acostumbrados que estamos a consumirlos (yo el primero).
Si no somos capaces de reducir la ingesta de estos alimentos, que sería lo ideal, deberemos incluir en la dieta productos que nos protejan de daños en el sistema vascular. Así se bloqueará toda esta “reacción en cadena de formación de placa” se detendrá.
La solución: introduce en la dieta más verduras, hortalizas y frutas. Esto añadirá a nuestro cuerpo polifenoles, flavonoides, carotenoides, vitaminas, polisacáridos y muchas otras moléculas que protegen nuestro organismo de daños por oxidantes, radicales libres, colesterol oxidado, TMAO y otros productos dañinos.
Muchos alimentos ricos en antioxidantes tienen probada su eficacia reductora del colesterol oxidado en sangre. Aquí pongo algunos de ellos y su publicación científica:
- Nueces: Effect of short-term hazelnut consumption on DNA damage and oxidized LDL in children and adolescents with primary hyperlipidemia: a randomized controlled trial.
- Té verde: Effects of flavonol-rich green tea cultivar (Camellia sinensis L.) on plasma oxidized LDL levels in hypercholesterolemic mice. The result suggests that tea flavonols have the potential to protect against cardiovascular diseases.
- Salsa de tomate: Bioactive Compounds of Cooked Tomato Sauce Modulate Oxidative Stress and Arachidonic Acid Cascade Induced by Oxidized LDL in Macrophage Cultures.
- Curri: Flavonoid rich extract of Murraya Koenigii alleviates in-vitro LDL oxidation and oxidized LDL induced apoptosis in raw 264.7 Murine macrophage cells.
- Frutos del bosque (sus antocianinas): Anthocyanins and their physiologically relevant metabolites alter the expression of IL-6 and VCAM-1 in CD40L and oxidized LDL challenged vascular endothelial cells.
- ….

El reishi tiene un elevado poder antioxidante
¿Si ya tenemos placa? Existen alimentos reductores de placa
Primero empieza a comer bien, para que no se forme más placa y sí, existen alimentos que se ha visto científicamente que reducen la placa.
Uno de los más económicos, afamados y demostrados protectores para el sistema circulatorio es el ajo.
Existen dos ensayos clínicos que han visto la eficacia del ajo para reducir el volumen de la placa aterosclerótica en comparación con placebo:
- Uno con 280 sujetos documentó una reducción significativa tras 3 años de tratamiento.
- El otro, un estudio observacional realizado durante dos años en 101 ancianos, voluntarios sanos, se vio una mejoría en la elasticidad de la arteria aorta. (administrando 300-900 mg/día de ajo pulverizado estandarizado en 1,3 % allina).
El bulbo de ajo es un potente captador de radicales libres, es decir, tienen alto poder antioxidante y, al final, de eso se trata, de incorporar alimentos antioxidantes y protectores a nuestra dieta, sea ajo, reishi, té verde u otros, y dejar que el organismo poco a poco corrija los daños originados con nuestra mala alimentación.